Según las cifras publicadas por el SERVEF, el paro registrado en el mes de enero en la Ribera, se ha situado en 16449 personas, es decir, 482 parados más que en el mes de diciembre, con un ascenso mensual del 3’02%.
Por su parte, los datos anuales indican que tenemos en este mes 275 parados menos que el mismo mes del 2024 lo que supone una disminución de desempleo anual del 1’64%.
En cuanto a la contratación, se han registrado 7415 contratos en enero del 2025, lo que ha supuesto 329 contratos más que en el 2024 es decir un 4’64% de incremento interanual. Por géneros, 3184 han sido a mujeres (42’94%) y 4231 a hombres (57’06%). La contratación indefinida mensual es de 3001 contratos, un 3’91% menos que el año pasado y la contratación temporal es de 4403 contratos lo que significa un 40’47% en indefinidos y la temporal un 59’38%. Los contratos han sido tanto en los temporales como en los indefinidos, un 58’93% a jornada completa y un 41’07% a tiempo parcial.
Para Raül Roselló, Secretario General Comarcal de UGT-PV, “Este mes los datos de empleo y paro no son buenos, como sucede en todos los meses de enero, por las actividades estacionarias características de la Ribera. Pero la tendencia de mejoría del empleo, tanto cuantitativa como cualitativamente, es indudable.
Todas estas cifras son indicativas de la mayor estabilidad del empleo introducidas por la última reforma laboral. Se registran más contratos y además son más estables y de mayor calidad ya que el 40 % son en contrato indefinido”
No obstante para Roselló “La calidad del empleo, no se deriva sólo de las condiciones de la contratación, sino que requiere de salarios justos y suficientes. En este sentido, España sigue siendo un país de bajos salarios. Para este 2025, UGT y CCOO han alcanzado un preacuerdo con el Gobierno para subir el SMI que se fijará en 1.184 euros mensuales (con 14 pagas). Ahora, este aumento debe trasladarse de manera plena a las empresas, sin que sea absorbido por la eliminación de complementos salariales de los convenios. Con este incremento, desde 2018 el SMI habrá aumentado un 60%, con un importante efecto positivo sobre la reducción de la pobreza y la desigualdad.
Por otro lado, los empleos deben ser productivos y desempeñarse en una jornada razonable. La jornada laboral máxima se ha mantenido invariable por más de 40 años. En este 2025 es fundamental que se produzca una reducción de la jornada hasta las 37,5 horas, como primer paso para lograr las 32 horas semanales. UGT reclama implementar un registro horario que limite la realización de horas extraordinarias, así como garantizar su pago con un 25% más” .
En resumen, en este mes los datos de empleo y paro no son buenos, como sucede en todos los meses de enero, pero la tendencia de mejoría del empleo en nuestro país, tanto cuantitativa como cualitativamente, es indudable. Quedan, no obstante, muchas mejoras estructurales que realizar, para lo cual hay que persistir en la senda de mejora hacia unos empleos mejor remunerados y con un tiempo de trabajo razonable, que permita compatibilizar la actividad laboral con los cuidados y el ocio, así como abordar el reforzamiento de las políticas activas de empleo para lograr reducir el desempleo de larga duración y mejorar la empleabilidad de las personas más vulnerables