Palabras sin presupuesto. Rafael Cervera
15 de abril de 2007
Creo que nadie pone en duda que el mundo rural en la Comunidad Valenciana necesita de presupuesto y de una política decidida para mejorar la calidad y condiciones de vida de los más de 330.000 ciudadanos que viven en pueblos de menos de 2.500 habitantes.
Por el contrario, todos somos conscientes de que de nada sirven las buenas intenciones y promesas, ya que si éstas no van acompañadas de la correspondiente partida presupuestaria, simplemente se las lleva el viento.
Por ello, es inaudito que según datos a los que ha tenido acceso la UPA-PV, el presupuesto de la Generalitat Valenciana para desarrollo rural en la Comunidad para el periodo 2007-2013 haya descendido hasta los 80,87 millones de euros, es decir 22,63 millones menos que en el periodo 2000-2006. Digo inaudito, porque el el conseller Cotino anunció hace pocos días una inversión por parte de la Generalitat de más de 2.000 millones para desarrollo rural, cuando la realidad es bien distinta y cualquiera puede comprobarlo por conducto oficial.
En términos globales y contabilizando también las ayudas del gobierno central y la UE, la Comunidad Valenciana recibirá 453,35 millones de euros para desarrollo rural en los próximos seis años, 225,1 millones menos que en el periodo anterior. Y ello es así porque la rebaja más importante en los fondos se produce en las ayudas de la UE, que descienden en casi 290 millones debido a la pérdida de la Comunidad de la condición de Objetivo 1.
Ahora bien, lo que UPA-PV no entiende es cómo la Generalitat, consciente de las condiciones de desigualdad en las que se encuentra el mundo rural valenciano respecto a las zonas urbanas y en lugar de solventar la rebaja presupuestaria de Europa con un incremento, también desciende su presupuesto considerablemente, en 22,63 millones.
Para UPA-PV, lo que debería hacer la Consellería de Agricultura no es disminuir las ayudas al desarrollo rural, como demuestran los datos, sino todo lo contrario: determinar cuáles son las necesidades de las comarcas de interior y zonas rurales de la Comunidad Valenciana, cuantificarlas y que una vez conocidas las ayudas provenientes de Europa y el Gobierno central, se complementen hasta alcanzar esa cifra. Si no se hace así, la brecha que separa el mundo rural del urbano no se reducirá nunca.
Firmado: Rafael Cervera Calduch, secretario general de la UPA-PV.