Responsabilidad social empresarial. Vicente Prieto y Juan Fco Richarte
En los tiempos que corren es dificil hablar de Responsabilidad Social de las Empresas (RSE), tanto en la comarca del Vinalopó corno en el resto de España, pero vamos a tratar de hacerlo a pesar de que hoy día podríamos hablar más bien de todo lo contrario.
La Comisión Europea en su libro verde titulado "Fomentar un marco europeo para la RSE", define la Responsabilidad Social de las Empresas como la integración voluntaria por parte de las empresas, en las preocupaciones sociales y medioambientales, en sus operaciones comerciales y en sus relaciones con sus interlocutores. Es decir, que las empresas verdaderamente responsables deben de preocuparse del medio ambiente, de sus consumidores, da comercio justo, de la calidad de sus productos etcétera. Pero sobre todo del bienestar de sus trabajadores/as.
En este sentido, queda claro que un comportamiento socialmente responsable, implica superar el mero cumplimiento de las obligaciones legales por parte de las empresas. Estamos acostumbrados, en el mejor de los casos, al estricto cumplimiento de la ley, y yo me conformaría en que fuera así en las empresas del Vinalopó, pues está ocurriendo todo lo contrario E.R.E.s sin que vengan a cuento, despidos improcedentes, economía sumergida, clandestmaje etc. Nuestros empresarios están aprovechando la crisis para arreglar sus beneficios. La RSE significa ir más allá del estricto cumplimiento de la ley. Según demuestran numerosos estudios y experiencias, parece ser que este «ir más allá. redunda positivamente en la competitividad y productividad de las empresas, haciéndolas incluso más resistentes a los envites de la crisis, según se desprende de informes elaborados por prestigiosas instituciones.
El informe Forética sobre la evolución de la RSE señala que son las empresas de mayor tamaño las que están consolidando en mayor grado las premisas de la RSE, mientras que la mayoría de las pequeñas y medianas empresas aún no han incorporado este concepto en su gestión.
Si tenemos en cuenta que el tejido empresarial predominante en nuestra comarca es mayoritariamente este último, nos podremos hacer una idea del nivel de desarrollo de la RSE, en nuestra comarca. El aludido informe Forética nos aporta otms datos de interés, como es que el 69% de las empresas consideren que la importancia y la implantación de la RSE será mucho mayor en los próximos años que en la actualidad. También cabe señalar que según este estudio, la absoluta mayoría de los ciudadanos, nueve de cada diez, rechaza abiertamente las prácticas irresponsables de las empresas, llegando a estar dispuestos a penalizar en su consumo a aquellas empresas que ejerzan prácticas y actitudes irresponsables.
En consonancia con ellos, pero destacando obviamente aquellos aspectos que consideramos que tienen más importancia desde una perspectiva sociolaboral, desde UGT establecemos una serie de variables que consideramos fundamentales a la hora de valorar la responsabilidad social de una empresa.
Serían las siguientes:
Respeto de los Derechos humanos.
Recursos humanos de calidad (empleo estable, formación, etcétera).
Igualdad de género y conciliación de la vida laboral y familiar.
Una empresa plural: inmigrantes y personas con discapacidad.
Una empresa segura: la prevención de riesgos laborales.
Externalización de actividades: contratando con calidad.
Medioambiente: una empresa sostenible.
Otros aspectos: gobierno corporativo, comercio justo, etcétera.
Desde UGT observarnos que la implicación y la participación de los trabajadores y sus representantes son el factor que en muchos casos va a determinar el éxito o el fracaso en la incorporación de modelos de gestión empresarial eficaces. En este sentido, cabe señalar que para practicar la RSE es esencial a compromiso de la alta dirección y una mayor participación del personal y sus representantes, así corno, el diálogo social con los representantes de los trabajadores, siendo este el principal mecanismo de definición de la relación entre una empresa y su personal.
La realidad es que muchas empresas no han entendido la ventaja que supone la participación de
unos trabajadores cualificados y motivados para el desarrollo empresarial, al contrario, en muchos casos se ha entendido que dicho desarrollo se alcanza a costa de los trabajadores y no con su colaboración.
Señalar, que la introducción de estas prácticas de RSE deben contribuir a democratizar y transparentar las empresas, con vistas a una nueva cultura empresarial en la que las personas, su desarrollo profesional y sus condiciones de trabajo, sean consideradas como fines esenciales de la empresa y de sus objetivos estratégicos.
Firmado: Vicente Prieto Pérez, secretario general de UC de la UGT-PV La Muntanya-Valle del Vinalopó. (*) Firma también Juan Francisco Richarte, responsable de Salud Laboral.