El dato de bajada del paro no alcanza para ocultar la tremenda realidad laboral de muchos valencianos y valencianas.
La EPA del tercer trimestre en la Comunitat Valenciana arroja un balance que únicamente es positivo en un primer análisis superficial. La radiografía del empleo, sin embargo, es mucho más negativa y preocupante dado que ofrece pocas dudas sobre la extensión de la precariedad, la parcialidad involuntaria, el paro de larga duración y la realidad de la existencia de un número muy importante de hogares con todos sus miembros en paro, con la consiguiente extensión de la pobreza y la exclusión social.
La realidad es que el sigue habiendo 542.600 valencianos y valencianas sin empleo; que la tasa de paro es del 22,37%, un punto superior a la del conjunto de España; que tenemos un 61,04 % de hogares con todos sus miembros en el paro; que un 13,13 % de hogares valencianos tienen a todos sus miembros parados; y que la tasa de temporalidad ha crecido y se sitúa ya en el 27,90 %.
Frente a esta situación desde UGT-PV confiamos en que el diálogo social valenciano pueda fructificar en un cambio de las políticas realizadas hasta la fecha y, en este sentido, vamos a seguir exigiendo el abandono inmediato del modelo de precariedad para poner todas las energías en las necesidades reales de la economía valenciana y el mercado de trabajo de la Comunitat, que no son otras que el cambio de modelo productivo y un imprescindible giro hacía la cultura de la estabilidad en el empleo, como ingrediente fundamental de un incremento de la capacidad de innovación y la mejora de la productividad. Al mismo tiempo señalamos que el necesario apoyo a los colectivos con mayores dificultades debe hacerse tanto con medidas de formación y políticas activas, como con una mayor protección a sus necesidades económicas básicas.
En cuanto al análisis de la Encuesta, se reduce la población parada durante este trimestre. Actualmente hay 542.600 personas paradas, 15.800 personas paradas menos que en el trimestre anterior. La tasa de paro se sitúa en el 22,37% y, por tanto, se ha reducido respecto al trimestre y año anterior, aunque sigue estando por encima de la media nacional, que se sitúa en 21,18%.
El número de personas paradas de larga duración es de 331.200, lo que representa un 61,04%. La mejoría respecto al trimestre anterior es prácticamente inapreciable, dado que el porcentaje se situó en el anterior trimestre en el 61,41 %, mientras que hace un año se situaba en el 62,43 %.
Desglosado por provincias, el paro baja con mayor intensidad en Castellón situándose en 58.300 desempleados (-9600), mientras que en Alicante registra 209.800 (-6700) y, por el contrario, aumenta ligeramente en la provincia de Valencia, que alcanza las 274.500 personas paradas (+500).
La evolución del paro sigue siendo peor para las mujeres ya que mientras el descenso trimestral para los hombres es de 11300 (-3,87%), para las mujeres el descenso es de 6500 (-2,42%).
Entre los jóvenes, el desempleo se reduce trimestralmente en 4900 (-5,49%) y se sitúa en 84.300.
Por sectores, el paro se reduce en todas las ramas de actividad con la excepción de los servicios, en el que los parados aumentan este trimestre en 10800. Por el contrario el mayor descenso se produce en construcción, que registra 3000 parados menos, esto es, una reducción del 13,51 %.
Respecto a la ocupación, se han creado 15800 empleos, lo que supone un crecimiento trimestral del 0,85%, alcanzando la cifra de 1.882.900 ocupados en la Comunitat. No obstante, cabe señalar que el número de mujeres ocupadas se reduce en 4700, esto es, una reducción del 0,55 %.
Por sectores, el número de ocupados crece en construcción (+2700) y servicios (+27100). Se produce en cambio una reducción del número de ocupados en agricultura (-3100%) e industria (-10900).
La tasa de temporalidad en el segundo trimestre del 2015 se sitúa en el 27,90%, incrementándose 0,10pp respecto al trimestre anterior y 0,90pp en relación con el mismo trimestre de 2014.
Los hogares con todos sus miembros en paro suponen todavía el 13,13 %, significativamente por encima del dato global para España que se sitúa en el 11,76 %.