28 de junio de 2006

Esta medida permitirá a los transexuales la posibilidad de cambiar el nombre y sexo en el Registro Civil, en el DNI, y en otros documentos oficiales, supone un avance hacia la plena igualdad del colectivo y está en línea con el derecho constitucional que tiene toda persona a ser y mostrarse públicamente como desee. Diez mil personas transexuales en nuestro país podrán corregir la situación anómala de no coincidencia entre identidades registral y real, algo que ya ocurre en países como el Reino Unido, Francia, Suecia, Italia, Dinamarca, Holanda, Bélgica y Turquía. UGT considera que este Proyecto de Ley será un instrumento útil para facilitar la inserción sociolaboral de estas personas pero reclama, además, cambios sanitarios, educativos y más políticas consensuadas en esta materia.
Como en años anteriores, UGT se une a la celebración del Día del Orgullo Gay y apoya cuantas medidas favorezcan a lograr la no discriminación por razones de orientación o identidad sexual. Después de que el año pasado fuese aprobada por el actual Gobierno la ley que ofrece la posibilidad de celebraciones de matrimonios entre parejas del mismo sexo, éste año, la presentación en el Congreso del “Proyecto de rectificación registral de la mención relativa al sexo de las personas”, supone un paso más hacia la plena igualdad.
Desde UGT consideramos imprescindible diferenciar entre cómo el individuo se identifica sexualmente, y el sexo biológico. Lo que conocemos como sexo social se refiere al género, y a su rol, es decir, al conjunto de normas y prescripciones que dicta la sociedad y la cultura sobre el comportamiento femenino o masculino. La identidad sexual tiene que ver con identificarse con las características biológicas de ser macho o hembra, y, la identidad de género con identificarse como hombre o mujer. Existen personas que se identifican con el sexo contrario, los transexuales, cuyo deseo es vivir permanentemente como persona del sexo opuesto.
UGT, entiende la transexualidad como el deseo de vivir y ser aceptado como miembro del sexo opuesto, generalmente acompañado de un sentimiento de incomodidad o de inadecuación al sexo anatómico propio. Este proceso de autodefinición, de identificación con un sexo u otro, empieza mucho antes de que el propio individuo sea consciente de ello.
Toda persona tiene el derecho de ser y mostrarse públicamente como desee, siendo este derecho una manifestación del derecho fundamental al libre desarrollo de la personalidad y de la dignidad de la persona, reconocido en el artículo 10.1 de nuestra Constitución. El derecho a ser diferente no sólo protege al individuo y a la minoría, sino también desarrolla una función institucional u objetiva trascendental.
Estimamos que la sociedad no debe rechazar a estas personas que sufren una estigmatización abocándoles a la marginalidad o a poner en grave peligro su salud. Actualmente los transexuales padecen, en casi todas las facetas de su vida, la marginación y exclusión social y laboral por no tener una documentación adecuada. Existen unas 10.000 personas en España con una identidad registral y civil que no se corresponde con la suya. No existe, hasta que no se apruebe el Proyecto de Ley la posibilidad de permitir el cambio de nombre y sexo en el Registro Civil y en el DNI de los transexuales.
UGT considera que con este Proyecto de Ley se va a lograr la modificación de la Ley de Registro de 1957 acompasando nuestra legislación a lo que ya es un avance auspiciado por el derecho europeo, por el Convenio Europeo de Derechos Humanos, por las recomendaciones del Consejo de Europa, y por el Parlamento Europeo. En nuestro entorno países como Reino Unido, Francia, Suecia, Italia, Dinamarca, Holanda, Bélgica y Turquía, ya regulan esta situación anómala de no coincidencia entre identidades registral y real.
Así, la futura Ley establecerá cambios registrales de sexo y nombre reconocidos judicialmente, siendo requisito necesario el diagnóstico médico de disforia de género, es decir, la no correspondencia entre la identidad sexual y el género, y un período de tiempo previo de dos años para el logro de una apariencia de la persona acorde con su sexo, sin que sea necesario el requisito de la cirugía. Lo que no regula la futura ley es si existe posibilidad de que las operaciones de cambio de sexo se incluyan dentro del catálogo de la Seguridad Social, como ya sucede en alguna Comunidad Autónoma, o correrán a cargo de las personas interesadas.
UGT estima que este Proyecto de Ley es un gran paso adelante e instrumento útil que permitirá avanzar en la igualdad laboral. Se abre la posibilidad de cambiar el nombre en el DNI y en todos los documentos para adecuarlos al sexo de la persona y no sufrir una posible discriminación al acudir a una entrevista de trabajo y comprobar que no se corresponde los datos de identificación de la persona con su sexo. El no disponer de un DNI coincidente dificulta el acceso al mundo laboral, su reinserción social y no se respeta su derecho a la intimidad. Un colectivo que nos preocupa es el de muchas mujeres transexuales que se ven abocadas a la prostitución.
Para el Sindicato además de modificar el Registro Civil, avanzar en la verdadera inserción, y consiguiente eliminación de discriminación, se debe exigir mucho más, entre otros, cambios sanitarios, educativos, intervenciones en materia laboral y emprender políticas con los agentes sociales y los sindicatos.
UGT apoya a las personas transexuales, la inserción sociolaboral de una minoría poco conocida y comprendida que vive en la marginación, exclusión y discriminación por no tener unos documentos adecuados a su sexo psicosocial. La modificación del Registro Civil para que las mujeres y hombres transexuales puedan adecuar su nombre y sexo es una cuestión de justicia y dignidad para cientos de ciudadanas y ciudadanos que actualmente no pueden desarrollarse como personas con plenos derechos.
Como en años anteriores, UGT se une a la celebración del Día del Orgullo Gay y apoya cuantas medidas favorezcan a lograr la no discriminación por razones de orientación o identidad sexual. Después de que el año pasado fuese aprobada por el actual Gobierno la ley que ofrece la posibilidad de celebraciones de matrimonios entre parejas del mismo sexo, éste año, la presentación en el Congreso del “Proyecto de rectificación registral de la mención relativa al sexo de las personas”, supone un paso más hacia la plena igualdad.
Desde UGT consideramos imprescindible diferenciar entre cómo el individuo se identifica sexualmente, y el sexo biológico. Lo que conocemos como sexo social se refiere al género, y a su rol, es decir, al conjunto de normas y prescripciones que dicta la sociedad y la cultura sobre el comportamiento femenino o masculino. La identidad sexual tiene que ver con identificarse con las características biológicas de ser macho o hembra, y, la identidad de género con identificarse como hombre o mujer. Existen personas que se identifican con el sexo contrario, los transexuales, cuyo deseo es vivir permanentemente como persona del sexo opuesto.
UGT, entiende la transexualidad como el deseo de vivir y ser aceptado como miembro del sexo opuesto, generalmente acompañado de un sentimiento de incomodidad o de inadecuación al sexo anatómico propio. Este proceso de autodefinición, de identificación con un sexo u otro, empieza mucho antes de que el propio individuo sea consciente de ello.
Toda persona tiene el derecho de ser y mostrarse públicamente como desee, siendo este derecho una manifestación del derecho fundamental al libre desarrollo de la personalidad y de la dignidad de la persona, reconocido en el artículo 10.1 de nuestra Constitución. El derecho a ser diferente no sólo protege al individuo y a la minoría, sino también desarrolla una función institucional u objetiva trascendental.
Estimamos que la sociedad no debe rechazar a estas personas que sufren una estigmatización abocándoles a la marginalidad o a poner en grave peligro su salud. Actualmente los transexuales padecen, en casi todas las facetas de su vida, la marginación y exclusión social y laboral por no tener una documentación adecuada. Existen unas 10.000 personas en España con una identidad registral y civil que no se corresponde con la suya. No existe, hasta que no se apruebe el Proyecto de Ley la posibilidad de permitir el cambio de nombre y sexo en el Registro Civil y en el DNI de los transexuales.
UGT considera que con este Proyecto de Ley se va a lograr la modificación de la Ley de Registro de 1957 acompasando nuestra legislación a lo que ya es un avance auspiciado por el derecho europeo, por el Convenio Europeo de Derechos Humanos, por las recomendaciones del Consejo de Europa, y por el Parlamento Europeo. En nuestro entorno países como Reino Unido, Francia, Suecia, Italia, Dinamarca, Holanda, Bélgica y Turquía, ya regulan esta situación anómala de no coincidencia entre identidades registral y real.
Así, la futura Ley establecerá cambios registrales de sexo y nombre reconocidos judicialmente, siendo requisito necesario el diagnóstico médico de disforia de género, es decir, la no correspondencia entre la identidad sexual y el género, y un período de tiempo previo de dos años para el logro de una apariencia de la persona acorde con su sexo, sin que sea necesario el requisito de la cirugía. Lo que no regula la futura ley es si existe posibilidad de que las operaciones de cambio de sexo se incluyan dentro del catálogo de la Seguridad Social, como ya sucede en alguna Comunidad Autónoma, o correrán a cargo de las personas interesadas.
UGT estima que este Proyecto de Ley es un gran paso adelante e instrumento útil que permitirá avanzar en la igualdad laboral. Se abre la posibilidad de cambiar el nombre en el DNI y en todos los documentos para adecuarlos al sexo de la persona y no sufrir una posible discriminación al acudir a una entrevista de trabajo y comprobar que no se corresponde los datos de identificación de la persona con su sexo. El no disponer de un DNI coincidente dificulta el acceso al mundo laboral, su reinserción social y no se respeta su derecho a la intimidad. Un colectivo que nos preocupa es el de muchas mujeres transexuales que se ven abocadas a la prostitución.
Para el Sindicato además de modificar el Registro Civil, avanzar en la verdadera inserción, y consiguiente eliminación de discriminación, se debe exigir mucho más, entre otros, cambios sanitarios, educativos, intervenciones en materia laboral y emprender políticas con los agentes sociales y los sindicatos.
UGT apoya a las personas transexuales, la inserción sociolaboral de una minoría poco conocida y comprendida que vive en la marginación, exclusión y discriminación por no tener unos documentos adecuados a su sexo psicosocial. La modificación del Registro Civil para que las mujeres y hombres transexuales puedan adecuar su nombre y sexo es una cuestión de justicia y dignidad para cientos de ciudadanas y ciudadanos que actualmente no pueden desarrollarse como personas con plenos derechos.