15 de noviembre de 2006
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA-PV) señala que la mejor opción para defender adecuadamente los intereses de los agricultores valencianos en el reparto de las ayudas derivadas de la OCM de frutas y hortalizas es que éste se haga dependiendo de la superficie cultivada.
Así un reparto regionalizado del importe total de las ayudas concedidas a España, atendiendo a la superficie, sería moderadamente beneficioso, ayudando a paliar la grave crisis de renta que sufren desde hace varios años.
En este sentido, la UPA-PV insta a la Conselleria de Agricultura a que entienda la reforma de la OCM de frutas y hortalizas como una oportunidad para los cítricos valencianos y que, ante el Ministerio, defienda el reparto de ayudas por la modalidad de superficie cultivada, y una regionalización de las ayudas. Puesto que si el reparto de las ayudas fuera únicamente para las industrias, tan sólo beneficiaría a las más potentes y además distorsionaría los precios de la libre competencia.
La UPA-PV también lamenta que el Sistema Informático Geográfico citrícola (SIG) en el ámbito de la Comunidad Valenciana, dependiente de la Generalitat no se encuentre actualizado y que, por ello, no pueda ser una herramienta que se pueda utilizar en estos momentos para conocer de forma rápida y efectiva las extensiones de nuestros campos citrícolas, como se desearía para el reparto.
Desde UPA-PV se han realizado algunas propuestas para que sean incluidas en la OCM. En primer lugar, por importancia, es necesario que se haga una discriminación positiva respecto a las explotaciones familiares agrarias, una vez realizada la modulación de las ayudas. Además sería necesario un apoyo al cambio varietal del cultivo, siempre y cuando beneficie a la producción, así como apoyar el arranque voluntario de cítricos por parte del agricultor.
Según la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos, la actual OCM de frutas y hortalizas, todavía vigente, no ha sido muy beneficiosa para el campo valenciano. De hecho, tan sólo un 40% de los productores se han podido acoger a ella, y siempre que formaran parte de las Organizaciones de Productores Citrícolas y demostrando la base territorial de la que disponían.