17 de octubre de 2006

UPA-PV alerta del paulatino descenso en el sector ovino en la Comunidad: un 12% menos en los últimos tres años La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA-PV) alerta del paulatino declive del sector ovino en la Comunidad Valenciana. En los últimos tres años, en la Comunidad Valenciana la cabaña de ovejas se ha reducido en más del 12%, pasando de 552.493 cabezas a 481.747, según los datos de la Consellería de Agricultura, Pesca y Alimentación. En la provincia de Valencia el descenso de ovejas es aún mayor, llegando hasta el 13%.

Para la UPA-PV, son varios los factores que favorecen el descenso vertiginoso de la actividad ovina en la Comunidad Valenciana: el desacoplamiento de las ayudas de la Unión Europea, la carencia de mano de obra cualificada, las complicaciones legislativas (cada vez más severas), pero sobretodo la falta de relevo generacional son las causas del paulatino declive que sufre el sector en todo España y en la Comunidad Valenciana en particular.

Según la UPA, vivir del ovino en los tiempos que corren es muy difícil, si no imposible, sobretodo para explotaciones pequeñas o familiares, ya que el bajo precio de las ovejas en el mercado les resta rentabilidad. Por lo que, en los últimos años se está dando un replanteamiento del futuro del sector por parte de los ganaderos y en muchas ocasiones la oveja se convierte en un complemento de otra actividad, más que en un medio de vida único.

Propuestas de la UPA para el sector ovino

La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA-PV) propone a las distintas administraciones, pero sobretodo a la autonómica, un esfuerzo presupuestario en políticas de desarrollo rural que permita fomentar este tipo de ganadería, atendiendo que el ovino tiene una importantísima función de vertebración y estructuración demográfica, fundamentalmente en la zonas de interior.

La redistribución de los costes en la cadena productiva, el fomento de la producción y elaboración de quesos de oveja, por parte de artesanos o cooperativas y la ayuda a jóvenes para su incorporación al sector, son otras de las propuestas. Asimismo, se deben controlar las importaciones ovinas procedentes de países con un sistema de producción completamente distinto y que conlleva a nuestro sector a una posición de desventaja en cuanto a precios.